Había una vez un argentino en Guatemala que quería tomar mate y no conseguía yerba.

– ¿Y si la importamos?

Así dicho parece sencillo, pero no fue magia. Lo que inició como una charla de café se convirtió en poco tiempo en un proyecto que nunca hubiéramos imaginado sin el detonante de la escasez. Y si bien, contaba con el conocimiento necesario en comercio internacional como para iniciar el proyecto, hubo que salir a abarcar otros temas en los que tal vez no era mi expertiz.

En el camino me encontré con trámites como permisos de importación, licencias sanitarias o certificados de libre venta. Términos que me eran desconocidos, pero con el apoyo del equipo de Transatlantic y sus asesores externos logré superar esos obstáculos.

También hubo que encontrar al proveedor adecuado, negociar precios, formas de pago, y sobre todo, acelerar los tiempos de despacho para lograr entrar primero en un mercado necesitado de nuestros productos antes de que se enfriara.

Pero, una vez definidos estos primeros datos, ¿A qué público apuntarle?

Como parecía natural iniciamos pensando en un pequeño grupo objetivo, principalmente argentinos y uruguayos radicados en Guatemala, los primeros afectados por la ausencia de algo, para nosotros, imprescindible. Pero el tiempo nos mostró que hay también entre los chapines muchos interesados en la cultura matera.

Y también ¿Cómo comunicarnos y darnos a conocer? No es novedoso decir que las redes sociales son “el lugar” para vender actualmente. Aprovechando las herramientas de las redes y una tienda en línea atractiva podemos llegar a más público incluso que con un local físico. En menos de 1 hora de nuestra primera publicación nos contactó el primer cliente. Un dato que no es menor, el público nos acompañó desde el inicio del proyecto, permitiéndonos un crecimiento permanente.

Y acá llegamos, a casi 3 años de iniciar este proyecto, Chepines se posiciona como uno de los principales importadores y distribuidores de yerba mate en Guatemala.

¿Cómo sigue el cuento? ¿Nuevas marcas? ¿Nuevos productos? ¿Puntos de venta físicos? El tiempo irá definiendo hacia dónde seguirá creciendo nuestra marca.

Mientras tanto: lo importante es seguir disfrutando de compartir un buen mate con amigos